Daniel Alcides Carrión
Símbolo de Sacrificio y heroísmo para la Medicina Peruana
El destino había escogido a una de las ciudades de la Sierra Central de nuestro país, para que Daniel a. Carrión García, el hijo del ande que asombro a la humanidad con su espíritu de sacrificio e investigación a fin de que la Medicina Peruana ocupe un sitial en el mundo científico.
Vivienda de Daniel Alcides Carrión
Carrión hijo de Doña DOLORES GARCIA NAVARRO, descendiente de padres españoles dedicados a la minería, natural de Huancayo y del Dr. BALTAZAR CARRIÓN, (médico y abogado) hijo de otro médico español, natural de Loja (Ecuador) ambos formaron un hogar modesto, no ostentoso, pero de consideración.
Doña Dolores García y Don Baltazar Carrión, padres de Daniel Alcides Carrión
(Ilustraciones: El Comercio)
Nació el 13 DE AGOSTO DE 1857 según partida de nacimiento. Formo parte del Centro de Estudiantes de Medicina del Perú, quien en su honor a su nacimiento organizo el PRIMER CONGRESO AMERICANO DE ESTUDIANTES DE MEDICINA, del 17 al 21 de agosto de 1957.
Sus primeros años de vida transcurrieron sin ningún tropiezo, pero a la edad de 8 años de edad pierde a su padre en el año 1865 en un accidente ocurrido en Huarica a 35 km de Cerro de Pasco, su tuvo caída de caballo, que termino en su deceso.
Al inicio su madre recibió apoyo económico y moral de su hermana, años mas tarde contrae matrimonio con don ALEJO VALDIVIESO, rico minero de nacionalidad ecuatoriana quien se convierte en tutor y protector de Carrión, quien cariñosamente le decía papacito.
En una foto donde aparece con sus hermanos y en el centro don ALEJO VALDIVIESO al lado de Carrión.
Familia de Daniel Alcides Carrión
Carrión termina su primaria en la ciudad de Tarma. A los 13 años hace un viaje a Lima a fin de matricularse en el primer año de Instrucción Media en el Colegio Nacional “NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE” (1870) terminando satisfactoriamente sus estudios a los 17 años.
En el año 1875, Carrión organiza su expediente y junto con la solicitud reglamentaria, se presenta para ingresar a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos de Lima, después de un brillante examen de ingreso se matriculo en la Facultad de Ciencias.
Después de terminar sus dos años de Ciencias Naturales (hoy premédica) ingreso a la Facultad de Medicina, en una de sus anotaciones en sus diversas libretas de apuntes indicaba “…Que puede esperarse de un bisturí en las manos del que vá a reconocer un forúnculo, si no sabe que vena o nervio pasa exactamente por debajo” dejando en claro su gran responsabilidad en su carrera, se conoce que sino pasaba tiempo entre libros lo pasaba con sus enfermos.
Cuando se desato la guerra del Perú con Chile, en 1879, Carrión comprendió el estado de emergencia, por lo que se ofreció voluntariamente a las filas del ejército el 13 de enero de 1881, estuvo en los campos de batalla de Chorrillos, San Juan y Miraflores, estuvo como practicante de cirugía ambulante del cuerpo de enfermeros, actualmente conocido como CRUZ ROJA PERUANA. Al perder con Chille, los colegios y aulas universitarias, cerraron hasta el año 1884, en este lapso vivió en un fundo de la sierra de su tio, hasta que en el año 1884 reinicio sus estudios cursando el 5º año de estudios, al 6º año curso las clínicas con los profesores Dr. LEONARDO VILLAR quien tenia a cargo la sala MERCEDES del Hospital DOS DE MAYO, y alumno del DR. ROMERO, de la Clínica Maisón de Santé.
Un accionar de Carrión fue emplear en la gente de la región de la sierra central la vacuna contra la viruela, salvando a más de quinientas vidas.
Carrión ansioso de contribuir de alguna manera al descubrimiento de la verdadera verruga andina hoy conocida como la Enfermedad de Carrión, quien se encontraba realizando su tesis de bachiller de medicina, ya había dedicado 3 años a dicho estudio, donde solo conocía que se manifestaba con alta fiebre y anemia, en el mes de mayo de 1885 en los laboratorios de la Facultad de Medicina, estudia y analiza una muestra sanguínea de un enfermo de verruga, pero no obtiene los resultados microscópicos que el requería, es por ello que viaja a Matucana, Tornamasa y sus anexos, en esos lugares recoge hierbas como uña de gato y suelda con suelda, cuya infusión brindada a los enfermos produce reducción de la fiebre y erupción dérmica o brote verrucoso.
Carrión fue un crítico del médico Chileno Izquierdo quien estudio poco sobre este padecimiento, y la denomino FIEBRE DE LA OROYA, siendo un critico indicando que nadie más que los médicos peruanos podrían conocer y dar alcances objetivos de dicha enfermedad.
Ante esto Daniel A. Carrión se intereso mas por la etiología de ambas enfermedades de la fiebre de la Oroya y de la Verruga Andina, es asi que tuvo la idea de practicar la inoculación humana, sus compañeros de estudio presumían el propósito y los resultados de su intrepidez, por lo que trataron de persuadirlo, pero el no escucho suplicas de profesores y compañeros, la cual llevo a cabo el dia 27 de agosto de 1885, la inoculación la hizo el Dr. Evaristo Chávez sangre de la paciente CARMEN PAREDES de 14 años.
Carmen Paredes, paciente de 14 años de edad, hospitalizado en la Sala "Nuestra Señora de las Mercedes" del Hospital "Dos de Mayo", a quien se le exudado del verrucona que padecia, con el cual se inoculó a Carrión.
Doctor Evaristo Manuel Chávez, médico quien inoculó a Daniel Alcides Carrión.
Después de practicada la inoculación, nuestro héroe Carrión anota sus observaciones hasta el 25 de setiembre, pues luego de ello ya lo hicieron sus compañeros dentro de sus anotaciones inmediatas fueron comezón bastante notable, dolores pasajeros, todo continuaba igual hasta el 17 de setiembre donde sintió un dolor fuerte en la articulación tibio tarciana izquierda que le impedía la marcha. Durante el día ligero malestar, pero por las noches calambres fuertes en las extremidades.
Jeringuita de Pravast
Instrumento médico utilixado para inocular a Daniel Alcides Carrión
(Ilustración: Précis Iconographique De Médicine Opératorire, 1885)
El 19 de setiembre a las 11.30 inicio un decaimiento y postración, escalofríos, también fiebre elevadísima difícil de medir con el termómetro, cefalalgias, dolores en el trayecto de ciertos nervios.
Desde esa fecha padecía insomnio por las altas temperaturas y dolores, otras manifestaciones, orina escasa de color rojo oscuro y muy sedimentosa, temperaturas por encima de los 39.4ºC.
A inicios de octubre tuvo vómitos, anorexia, decaimiento y postración, se evidencia un nuevo síntoma sobresalto de tendones en brazos y antebrazos, comida y medicamentos le provocaban náuseas. Lengua seca y áspera, mucha sed, dolores en el hígado, riñones y zona precordial, pulso frecuente, débil por momentos. La molestia el soplo carotideo.
EL 3 de octubre los síntomas son mas acentuados, evacuaciones seguidas, postración. El 4 de octubre el pulso y la temperatura fue bajando, el sobresalto de tendones era evidencia, por lo que le indican transfusión sanguínea por lo que acepta ser trasladado al Hospital Frances Maison de Sante, donde un compañero de 1año y le dice estas palabras “Aun no he muerto, amigo mío, ahora les toca a ustedes terminar la obra comenzada, siguiendo e camino que les he trazado…”
Luego abraza a su madrina, y le pide que oculte su estado de salud a su madre, dirige una última mirada a la zona hospitalización se le escapa una lagrima y cae desmayado en los brazos de sus amigos. Recupera el conocimiento y es conducido en camilla a la Clinica Maison de Santé. A la 1 de la mañana presenta carfología, piel fría y pulso depresible.
Respiración es difícil, quejumbrosa, duerme unas horas hasta las 4am, donde hace deposición líquida.
El 5 de octubre continúa con temperaturas por debajo de los 36ºC, realiza deposiciones, a las 9.20 entra en coma interrumpido por quejidos entremezclados con palabras divariadas finamente dice la siguiente frase “Enrique c’est finit” (ENRIQUE SE ACABO) no vuelve a hablar.
Los primeros síntomas de la enfermedad se iniciaron a los 20 minutos de practicada la inoculación. Carrión sufrió 38 días de enfermedad, falleciendo el 5 de octubre a las 11.30pm en el Hospital Francés, hoy Clínica Maison de Santé.
Doctor Evaristo Manuel Chávez, médico quien inoculó a Daniel Alcides Carrión.
Por haberse practicado la inoculación hubo acción judicial, por discrepancias políticas que por motivos científicos, se hizo la autopsia al cadáver de Carrión, sus resultados sirvieron para verificar las lesiones que produce la verruga tanto en el organismo humano como en animales.
Los estudios históricos de la Medicina comprueban la existencia de errores acerca de la etiología de ella. La obra de Carrión aclaro la etiología de ella.