Reseña Histórica
La Cátedra de Pediatría de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos fue creada en 1896, 40 años después de la fundación de la Facultad de Medicina de San Fernando. El primer profesor de la Cátedra fue uno de los impulsores más convencidos de su creación, el Dr. Francisco Almenara Butler quien, en colaboración con el Dr. Rómulo Eyzaguirre, la dirigió hasta 1919.
En 1920 se hace cargo de la Cátedra el Dr. Enrique León García Pitot, quien fue incorporado como profesor de la Universidad, en la efervescencia del movimiento por la Reforma Universitaria de 1919.
En noviembre de 1929 fue inaugurado el Hospital del Niño; y si bien desde ese momento se establecieron vínculos con la Cátedra de Pediatría, no fue sino hasta 1937 cuando por gestiones de la Facultad de Medicina ante el Ministerio de Salud, y durante la dirección del Dr. Gerardo Alarco, se cede el Pabellón Nro. 1 del Hospital para la docencia de la Cátedra de Pediatría de la Facultad de Medicina de la UNMSM.
Puede decirse que la Cátedra de Pediatría de la Facultad de Medicina de San Fernando ha tenido hasta la actualidad tres grandes períodos:
El que va desde 1896 a 1936, que correspondería a su etapa fundacional, cuando el curso, a cargo de muy pocos profesores, se realizaba en la sala San José del Hospital Santa Ana y luego en el Pabellón Nro 4 del Hospital Loayza, con énfasis en los aspectos nutricionales e higiénicos.
El que va de 1937 a 1960, que podríamos denominar su etapa de afirmación y crecimiento. En él la enseñanza teórico-práctica se realiza en el Hospital del Niño, con el cual se establece una relación armónica y de mutuo beneficio. En este período se incorporan progresivamente más profesores, se abren nuevas y diferentes sedes docentes, se dispone la enseñanza del curso en secciones y se enfocan las enfermedades del niño basándose en aspectos fisiológicos y patogénicos propios de la edad infantil
Finalmente, el período que va de 1961 hasta el presente, y que correspondería al de su desarrollo y modernización. Período contradictorio y difícil, determinado en sus inicios por la crisis que sobrevino a raíz de la lucha de docentes y alumnos en defensa de la participación estudiantil en el Gobierno de la Facultad. Y por otro lado, por la complejidad de los escenarios políticos y sociales del país, cargados de tensiones y conflictos, que en las últimas décadas repercutió negativamente en la vida universitaria.
En este período, la enseñanza, sin dejar de atender los aspectos nutricionales e infecciosos de la niñez, empieza a sustentarse progresivamente en la comprensión de los mecanismos celulares y moleculares de la salud y la enfermedad, se amplía el conocimiento de la neonatología y se proyecta el aprendizaje de los problemas de la infancia en la comunidad.
Es posible que estemos ante un nuevo momento en la vida de la Cátedra de Pediatría, y de la enseñanza de la misma como medicina integral del niño. Hoy hay nuevos desafíos respecto a la atención y cuidado de la salud del niño, y nuevos desafíos en la formación de quienes atenderán la salud de las personas.